Una foto condensa una idea, congela un momento, una situación, una sensación. Al mismo tiempo te hace sentir, mirar, contemplar.
Una buena foto de arquitectura, logra todo eso. Te transmite todo lo que el arquitecto diseña, toda la intención proyectual que tiene. Esto se logra a través de buenos ángulos, los cuales muestran situaciones concretas de la edificación, muestran diferentes usos. Se logra a través de la luz, de lo que se ve y no se ve.
Una buena foto de arquitectura te muestra un edificio vivo, por dentro y por fuera.
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